Agota los tiempos agosto con su último viernes. Septiembre asoma en su lugar. Suave y cariñoso, permite dos días para el jet lag. Se muestra tranquilo, seguro. Todo empieza y él lo sabe.
Sonrisa se va con el mes. El alma desbordada ocupa ya el espacio íntimo. De vuelta al hogar. Sentir es vivir. Fue necesario salir y gritar; es sabio recogerse y callar.
De vez en cuando, renacer.
Aquí estoy. Nueva. Preparada para el baile. Mirada completa en el espejo antes de salir. Vestido lila, sonriente y con miedo. ¿Acaso alguien pensaba que Sonrisa no era yo? Respiro hondo.
Que el mundo coloque su rostro para mi beso. Voy.
A, Dani, Jose y Carlos, que sentados a mi lado me habéis ayudado a dar forma a este espacio;
ResponderEliminara los que habéis dedicado un minuto a leer lo que me ha dictado el alma; a los que me habéis enviado cariñosos mensajes; a Tuidad y Lolaylo, tan fieles y cercanas; a JoseLuis por sus siempre preciosas palabras. Gracias.
¡Baila! En el territorio de la danza no hay miedo, sólo presente. Me gusta verte disfrutar. Agradezco a la vida el encuentro. Abrazo.
ResponderEliminarNunca más oportuno el guiño. Por lo que tiene de provocador el baile flamenco, de retador. Nueva etapa en la que lo pasado, fue. Perogrullada. Y fue con sus luces y sombras como ocurre casi siempre. Es no decir mucho pero para decir decir, ya están los sabios; yo los copio, los leo y a algunos los rozo a ver si por ósmosis...
ResponderEliminarFeliz final, feliz principio, feliz vida. Seguiremos en ella por convicción. Te quiero mil.
Lolaylo
No le tengas miedo al miedo, él es un aliado que te da prudencia. Solo paraliza cuando no es reconocido y esa fase, tú, ya la has pasado.
ResponderEliminarHa sido muy interesante leerte. Mucha suerte en tu nueva etapa... SIENTE!!!!!!